EL ARGUMENTO
Esa melancolía por alcanzar la flor cortada
el minuto impasible
las mariposas fresquísimas
los barcos
los trenes
los hilos de sangre
que salen por los rotos agujeros.
A veces el futuro parece un niño dormido
y algo más
que un poema
donde sollozan los ojos
blandamente desatados
sin embargo,
de todos esos ojos salen antepasados míos
y más allá de la centuria y del hoy y el olor a tierra
y el coñac del tiempo
renazco
y habito el nuevo milenio
como ese testigo
que vuelve a declarar, otra vez, a favor de la poesíA
PARAPENTE
doy vueltas y vueltas doy
en esta semiesfera en la arroyada del calicanto
parezco excesivamente huesuda también el desierto es
como un ganso sietemesino
no hallo
más
que arenal arenal arenal
debería ser marrullero taimado bribón hasta vandálico
pero no
julio fraterniza con mi temperamento
la pampa larga el tamarugal la cabeza de vaca
provoca escudriñándome
alzándose a todo manotazo la hemoglobina
se viene a moquillo tendido
el vuelo inaplazable, aunque, innecesario
en parapente
mi dios
como
un diplomado en aeronáutica
un magíster en caradura
doctorarse en psicopatía intelectual
tiene sus ventajas.
LUJURIA
toda obsesión sólo ha sido mía como si eso me endemoniara
aunque nunca vi a mi madre sacar los pies del plato
me nace con ese gustillo fluvial
a picamaderos – creo yo – triturando usos
verbales
arcaicos
obsoletudos
antediluvianos no son más
que un fiambre una zona muerta
alguna vez ojos indefendiblemente pequeños
por eso déjame hablar del traqueteo
en el sarao
palpitamos carnavaladas
trasmutaciones en juegos paralímpicos
lujuria a contraluz a contramuro
sin contraindicaciones ni contraposiciones
terrenal recorrido bajando
subiendo
una y otra vez hasta hallar la patria
con el sol al hombro
hace veinte años
esa vivacidad mefistofélica nos revolcó y tumbó
en el barriobajero en el centro mismo de la ciudad
no hay luz sin sombras hechas de recuerdos
ni abstinencia sin pensión de invalidez.
ROCÍO L'AMAR
Esa melancolía por alcanzar la flor cortada
el minuto impasible
las mariposas fresquísimas
los barcos
los trenes
los hilos de sangre
que salen por los rotos agujeros.
A veces el futuro parece un niño dormido
y algo más
que un poema
donde sollozan los ojos
blandamente desatados
sin embargo,
de todos esos ojos salen antepasados míos
y más allá de la centuria y del hoy y el olor a tierra
y el coñac del tiempo
renazco
y habito el nuevo milenio
como ese testigo
que vuelve a declarar, otra vez, a favor de la poesíA
PARAPENTE
doy vueltas y vueltas doy
en esta semiesfera en la arroyada del calicanto
parezco excesivamente huesuda también el desierto es
como un ganso sietemesino
no hallo
más
que arenal arenal arenal
debería ser marrullero taimado bribón hasta vandálico
pero no
julio fraterniza con mi temperamento
la pampa larga el tamarugal la cabeza de vaca
provoca escudriñándome
alzándose a todo manotazo la hemoglobina
se viene a moquillo tendido
el vuelo inaplazable, aunque, innecesario
en parapente
mi dios
como
un diplomado en aeronáutica
un magíster en caradura
doctorarse en psicopatía intelectual
tiene sus ventajas.
LUJURIA
toda obsesión sólo ha sido mía como si eso me endemoniara
aunque nunca vi a mi madre sacar los pies del plato
me nace con ese gustillo fluvial
a picamaderos – creo yo – triturando usos
verbales
arcaicos
obsoletudos
antediluvianos no son más
que un fiambre una zona muerta
alguna vez ojos indefendiblemente pequeños
por eso déjame hablar del traqueteo
en el sarao
palpitamos carnavaladas
trasmutaciones en juegos paralímpicos
lujuria a contraluz a contramuro
sin contraindicaciones ni contraposiciones
terrenal recorrido bajando
subiendo
una y otra vez hasta hallar la patria
con el sol al hombro
hace veinte años
esa vivacidad mefistofélica nos revolcó y tumbó
en el barriobajero en el centro mismo de la ciudad
no hay luz sin sombras hechas de recuerdos
ni abstinencia sin pensión de invalidez.
ROCÍO L'AMAR
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